¿Ver a Minnesota Timberwolves e Indiana Pacers en las finales de conferencia de la NBA es una sorpresa? Por supuesto, pero no una que deba hacer que nadie se lleve las manos a la cabeza.
Siendo dos mercados pequeños, quizás el seguimiento inicial sea menor al que algunos querrían, pero los que están en la propia liga parecen entender que es todo un éxito para la propia competición estadounidense. Esa es justo la valoración que hace Jason Kidd, quien cree que la NBA está contenta por lo ocurrido, ya que desde hace tiempo se ha esforzado para tener un torneo de alta competitividad en el que no sólo unos pocos equipos poderosos aspiren a ganar los campeonatos.
«A la liga le encanta. Es genial. Es genial para la liga. Hoy escuché una pregunta: ¿Habrá alguna vez otra dinastía? Con el movimiento de jugadores y habiendo tanta juventud, ya veremos. Pero es genial. Esta paridad le da a todos la oportunidad de creer realmente que pueden ganar un campeonato cuando están en la línea de salida de este maratón», comenta el head coach de los Dallas Mavericks a Eddie Sefko de Mavs.com.
Mientras Kidd celebra que el trabajo de fondo de la NBA haya dado sus frutos, de igual manera prepara ya las finales del Oeste que disputará ante Minnesota Timberwolves. Los de Minneapolis se han cargado al campeón, Denver Nuggets, y apuntan a ser un rival durísimo en la carrera por el anillo.
(Fotografía de Alex Goodlett/Getty Images)