30 equipos, 30 secundarios 2024 – División Pacífico

Segundo episodio ya de este celebrado serial. Sigue la aleatoriedad en los representantes de cada equipo. Podéis leer la primera parte aquí. Vamos pues. Golden ...

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Por David Sánchez

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Segundo episodio ya de este celebrado serial. Sigue la aleatoriedad en los representantes de cada equipo. Podéis leer la primera parte aquí. Vamos pues.

Golden State Warriors – Dejan Milojevic

Todavía recuerdo escribir la noticia informando de que los Golden State Warriors incorporaban a Dejan Milojevic a su cuerpo técnico. Era junio de 2021 y desconocía quién era aquel preparador serbio más allá de sonarme su apellido gracias a su etapa como jugador de Partizan en Euroliga. En la prensa estadounidense, claro, rescataban lo más llamativo. Milojevic había trabajado en etapas de formación con Nikola Jokic.

La excusa para fichar al entonces técnico del Budugnost VOLI Podgorica era James Wiseman, gran apuesta de los de la Bahía en el Draft de 2020. El chico había demostrado condiciones en sus primeros días en la NBA, pero le faltaban fundamentos a granel y una lesión de menisco le dejó en solo 39 partidos. Milojevic se encargaría de buena parte de su trabajo individual. 

Sirva todo esto para alumbrar una figura desconocida por el gran público hasta que, por desgracia, saltó a la primera plana de forma trágica. Uno no es del todo consciente del peso deportivo (aunque sea lo de menos) y humano que llega a tener una persona dentro del organigrama de una empresa deportiva. 

La muerte de Dejan Milojevic en Utah después de sufrir un infarto mientras cenaba con una parte de la expedición ha partido en dos la temporada de los Warriors. Y, sobre todo, las vidas de los que le conocieron. Dos partidos suspendidos, Steve Kerr, Mike Dunleavy y otros miembros del equipo viajando a Serbia para acudir a su funeral, leer que Stephen Curry y el resto del grupo siguen viéndolas y deseándoselas para recuperar la normalidad del día a día…Hacen tomar perspectiva a cualquiera de lo que es importante y lo que  no.

En los últimos compases del fantástico documental deportivo Sunderland Til’ I Die, el fallecimiento de uno de los aficionados que aparece en las tres temporadas congrega a todos los hinchas del Sunderland que llevan con el espectador desde el primer capítulo, jugadores de la plantilla e incluso se le hace un homenaje en el Stadium of Light. 

Eso es el deporte de masas. El sentirte cerca de los tuyos a través de unos colores. El crear lazos inesperados con un tipo de semblante imperturbable que cambia Podgorica por Silicon Valley. El que los seres queridos de la persona que se ha ido se sientan arropados por miles de desconocidos que, en otra escala, comparten su dolor. Descanse en paz, brate. 

Los Angeles Clippers – Russel Westbrook 180 viviendas

Es curiosa la narrativa que ha acompañado a la carrera de Russell Westbrook. Cuando Kevin Durant decidió dejar Oklahoma City para marcharse a Oakland, se convirtió en enemigo nacional. El villano de la película. Como reverso, esto quizás podría haber llevado a Russ a situarse como el héroe de la historia. O, al menos, como alguien neutral. Sin embargo, la marcha de KD exacerbó sus excesos de juego y carácter en cancha, convirtiéndose en un personaje tremendamente divisivo para el aficionado NBA. “Conmigo o contra mí”, era su credo. 

Su fama ni siquiera viró con un MVP bajo el brazo o cuando supo dar un paso a un lado para integrar a Paul George. Westbrook llegó a  Los Angeles siendo ya poco más que un juguete roto, y lo vivido en su etapa como laker no iba a aliviar las cosas. Russ había bajado mucho las revoluciones anímicas en pista. Seguía siendo un ciclón para lo bueno y para lo malo, pero la confrontación había desaparecido. Esa que siempre escondió al que sus compañeros definen como un grandísimo ser humano. 

Los Clippers han sido una tabla de salvación para el otrora MVP. Desde que puso un pie en el otro LA, se hicieron evidentes los problemas de confianza (sí, de confianza. En Westbrook) que le afectaban como oro y púrpura. A las órdenes de Ty Lue y reencontrándose con su amigo Paul George, Russel aceptó de buen grado un rol secundario e incluso recuperó el buenhacer defensivo que hacía años había dejado atrás. 

De repente dejaron de ser noticias sus malas caras, los desplantes o los enfrentamientos continuos con los aficionados de su propio equipo. Por fin salió a la palestra su lado humano. Westbrook volvió a Los Angeles, la ciudad que le vio nacer, para reintegrarse de nuevo en su comunidad. Con ello en mente, el jugador llevaba tiempo persiguiendo los fondos con los cuales ayudar a las gentes de South Central LA, la zona en la que Russ comenzó a lanzar sus primeros tiros. ¿El proyecto? Construir 180 viviendas de ayuda social allí donde el barrio se levantó ante los policías que acabaron con la vida de Rodney King en 1992. 

30 equipos, 30 secundarios 2024 - División Pacífico
Fotografía de Russell Westbrook (vía Instagram)

La fundación ‘Why not’ liderada por el jugador también dará a luz escuelas de empleo y participará en al creación de negocios centrados en la comunidad. He conocido a villanos mejores. 

Los Angeles Lakers – Gabe Vincent

Por segunda ocasión en tres años, Los Angeles Lakers trataron de pescar en Miami apostando por un exterior que había roto a jugar bajo la tutela de Erik Spoelstra. En 2021 fue Kendrick Nunn, un combo guard que no había pasado por el Draft pero que se mostró como un jugador competente en ambos lados de la cancha. Especialmente en 2020, año en el que los Heat llegaron a las finales y en el que Nunn fue elegido segundo en la carrera por el Rookie del Año. 

En Los Angeles, se perdió su primera temporada al completo por problemas en la rodilla y, a su regreso, su juego ofensivo había desaparecido y su defensa fue un problema insostenible cada vez que pisó la pista. Nunn fue traspasado a Washington en el movimiento de Rui Hachimura y, solo unos meses después, marchó a Panathinaikos para jugar a las órdenes de Ergin Ataman. Gran temporada la suya en Grecia. 

Llegamos pues a Gabe Vincent. Otro combo guard importantísimo en el camino de los Heat a las últimas finales gracias a su tiro, pinceladas creativas y defensa exterior. ¿Sabéis cómo va su paso por los Lakers? Efectivamente. El exterior acaba de volver de una baja de cinco meses (jugó un solitario partido ante los Bulls en diciembre) por problemas en la rodilla. Sus promedios son los más bajos de carrera desde su año sophomore y parece lejos de poder ser una pieza de rotación fiable en playoffs. 

A Nunn se le firmaron 10,5 millones de dólares por dos años, mientras el contrato de Vincent asciende a 33 en tres temporadas. Afortunadamente para los de oro y púrpura, otras apuestas ‘menores’ como Cam Reddish o Jackson Hayes han salido mejor. Pero mi cabeza no puede eludir dos cuestiones: 

  1. ¿Alguien ha investigado si Spoelstra practica algún tipo de magia arcana?
  2. ¿Quién demonios hace las pruebas médicas en Los Angeles Lakers? ¿Es LeBron el médico además del General Manager? 

Phoenix Suns – Chris Valle

En el periodismo español, un oficio ya de por sí precario y lejos de sus días de gloria, no hay figura más vilipendiada que la del corresponsal. La profesión cada vez cree menos en el valor de contar las cosas in situ. Supongo que saldrá a cuenta llenar esos escuetos presupuestos con las pagas a los tertulianos de turno. Y yo lo echo de menos en esos pequeños detalles que sólo se pueden extraer de cuerpo presente. Hace un tiempo escribí aquí un artículo sobre el sonido de los pabellones NBA. Las canciones que sonaban cada vez que cierto jugador metía una canasta, chanzas cómicas en formato audible, instantes que marcan la historia de una franquicia por los sonidos que emite la grada… 

La sensación al terminarlo es que me faltaban toneladas de esa información absurda cuya única fuente fiable es vivir en persona el ambiente de cada estadio. Por eso se agradece cuando cosas como estas trascienden para los que miramos desde una pantalla: 

Tras un encuentro en el FootPrint Arena de Phoenix, Steve Kerr se quejaba agriamente de la música del pabellón. Desde su perspectiva, su equipo defendía peor en esa cancha porque el ruido no permitía la correcta comunicación defensiva. “Es como un club de South Beach. Es agobiante”. Esta fue la respuesta de Chris Villa, el DJ de la cancha de los Suns:

https://www.youtube.com/watch?v=MQttmVXkSWQ&ab_channel=BallHound

Kerr, claro, se lo tomó con humor. “Fue muy gracioso, me encantó”. 

Sacramento Kings – Keon Ellis

Cuando se cierra una puerta se abre una ventana. Y a veces el contratiempo de una lesión da pie a un nuevo descubrimiento. La temporada de los Sacramento Kings no está siendo necesariamente peor que la anterior. Puede que acaben cayendo al play-in, pero ahora mismo tienen un 57,9% de victorias cuando cerraron el pasado curso terceros del Oeste con un 58,5%. 

El equipo quizás haya sido más inconsistente que el curso pasado, dejándose partidos ante rivales menores y sometiendo a rivales de gran entidad en la misma semana. Sin punto medio. La peor noticia de su temporada, en realidad, está en el bajón sufrido por De’Aaron Fox respecto al año pasado y al inicio de este mismo. Domantas Sabonis ha hecho una temporada inconmensurable, Keegan Murray ha crecido una barbaridad, Harrison Barnes sigue siendo Harrison Barnes y Malik Monk ha firmado el mejor año de su carrera dando un paso adelante en lo que ya hacía muy bien (anotar) y añadiendo dotes creativas. 

Ahora bien, Kevin Huerter sí que puede ser visto como parte de esa aparente regresión. El curso anterior el escolta tuvo un año de carrera destapándose como  uno de los mejores tiradores de la liga. Su lanzamiento tras pase a la mano con Sabonis produjo 1,15 puntos por posesión, solo superado por Stephen Curry entre jugadores que lanzaban más de dos tiros tras handoff por partido. Su volumen en ese tipo de acciones fue desorbitado, superando por 63 jugadas a Jordan Poole. 

Estar en un 40% dada la dificultad de la mayoría de sus triples multiplicaba las posibilidades de los Kings. Por eso su techo bajó cuando tanto cuando, ante los Warriors en primera ronda del Oeste, sus guarismos de desplomaron hasta apenas sobrepasar el 20% de acierto. Este curso Huerter firmaba un 36,1% desde el triple, peor marca de carrera. Un nivel de acierto que no le hacía indispensable en el sistema como lo era anteriormente. Por eso su lesión, que ha supuesto la entrada de Keon Ellis en el quinteto inicial, le otorga a Sacramento matices que enriquecen el proyecto a medio plazo.

Desde la lesión de Huerter, Ellis ha partido de inicio en todos los encuentros, pasando de promediar 3,9 puntos, 1,6 rebotes 1,3 asistencias y 0,7 robos en 13,6 minutos por noche a 8 / 4,1 / 2,2 / 1,4 en 27. Apenas 10 partidos le han bastado parta demostrar su potencial como jugador All-Defensive. Ellis desprende un don especial para medir los tiempos atrás. Más allá de sus obvias condiciones (brazos interminables para alguien que no llega a los dos metros), sorprende cómo compensa su  falta de centímetros con exquisito timing y posicionamiento. Los atacantes le evitan en el uno contra uno, tratando de empujarle a la defensa del lado débil. Sin embargo, el escolta también marca diferencias desde ahí con su anticipación y unos barridos que recuerdan al mejor Andre Iguodala. 

https://twitter.com/SacFilmRoom/status/1714038126388375895

Su versatilidad, además, permite que Keegan Murray no esté tan exigido atrás, disparando las posibilidades de un colectivo que ya cuenta con dos grandes defensores de partida, alguien por encima de la media como Harrison Barnes y un Domas que, a pesar de sus limitaciones, no negocia un choque o esfuerzo. En estos diez encuentros, los Kings son la 11ª mejor defensa de la competición después de ser la 18ª antes del parón del All-Star. Evidentemente, Ellis no suma en ataque lo que Huerter, pero está por encima del 40% en triples, toma decisiones simples y cada vez se le ve más suelto incluso en  pequeñas secuencias desde el bote. Si los Kings corrían el riesgo de estancarse a corto plazo, la aparición de Ellis supone limitar ese peligro por la profundidad que le dota al roster.

(Fotografía de portada de Ezra Shaw/Getty Images)

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